Plataformas digitales

A partir del 1 de junio de 2020 entra en vigor un nuevo esquema de gravámenes a través de empresas que operan en lo que se conoce como Economía Digital, específicamente referidas a aquellas empresas cuya actividad se desarrolla a través de plataformas digitales en Internet.

 

Una parte de estas nuevas obligaciones es la retención de Impuesto al Valor Agregado (IVA) e Impuesto sobre la Renta (ISR) que efectuarían extranjeros a personas físicas que realicen actividades a través de plataformas digitales.

 

En términos generales, la plataforma digital deberá retener el 8% de IVA y un porcentaje de ISR sobre el total de ingresos dependiendo del giro del comercio y de su nivel de ingresos. La tasa de retención de ISR puede ir desde un 2% hasta un 17%.

 

Por ejemplo, si un comerciante decide colocar su catálogo de productos en Amazon para realizar ventas a través de esa plataforma, Amazon efectuará estas retenciones al comerciante. Aplicando las tarifas máximas, la retención puede llegar a ser de un 25% (17% de ISR y 8% de IVA).

 

Una crítica es el efecto que estas retenciones tienen en este tipo de comercios dada la naturaleza de los mismos, efecto que puede llegar a representar un alto costo de capital de trabajo.

 

Entre otras cosas, este nuevo régimen de retenciones no prevé un esquema de devoluciones, descuentos o bonificaciones. Esto es, la retención se efectúa siempre sobre el total de la venta, y no se contempla que pueda haber devoluciones de ventas, lo que afecta el flujo del comerciante.

 

Las devoluciones de comercio electrónico tienen tasas más altas que el comercio presencial. En el caso de Amazon, se registra la siguiente estadística en cuanto a devoluciones como proporción de las ventas:

Categoría de producto Tasa de devoluciones sobre ventas
Libros 3% (12 a 15% en otros comercios)
Electrónicos De 3 a 5%
Ropa Más de 25%
Hogar De 5 a 15%
Zapatos De 20 a 25%
Promedio general De 5 a 15%

En estos casos, una persona que enajene ropa, y le apliquen una retención del 13% más un 8% de retención de IVA, ve su flujo de operación afectado en un 21%. Si a eso se le adiciona que tiene una tasa de devoluciones de producto del 25% sobre el cual el comerciante debe devolver el monto de la venta, se tiene que el régimen es inhibitorio del comercio electrónico en el país. El comerciante que desee operar a través de estas plataformas digitales deberá contar con un robusto capital de trabajo para soportar el financiamiento tanto de las retenciones de impuesto como de las devoluciones de clientes.

 

Esta situación puede propiciar que los comerciantes decidan no operar a través de estas plataformas digitales, poniendo en riesgo el desarrollo del comercio electrónico en México.

 

Comments

comments

más recientes

Artículos relacionados